Para Azarug la clave es la educación y la conciencia y hay que empezar por uno mismo "Yo creo que los cambios los producen las personas. Podemos conseguir lo que queremos para nosotros y para el medio ambiente". Por eso participó también en la limpieza de chapapote durante el Oleg y se sumó a las manifestaciones contra las prospecciones petrolíferas de Repsol en Canarias. Colabora con la Coordinadora contra la Regasificadora y en la asamblea de Santa Lucía contra las prospecciones petrolíferas. Además es miembro del colectivo de Pozo Izquierdo, su pueblo, para la protección del litoral. Coraje, voluntad y ganas de cambiar el medio ambiente, en su entorno, no le faltan.
Con sus jóvenes ojos Azarug ya ha visto la transformación de su isla y los impactos en el medio ambiente: "Desde que tengo un poco de conciencia, lees, ves cosas y te das cuenta de lo que pasa en el mundo. Ahí empecé a abrir los ojos. Las prospecciones de Repsol en las Islas Canarias fue mi apertura definitiva. Lo que quieren hacer en Canarias es lo que quieren hacer en el mundo. Los intereses de los grandes que usan recursos del viejo modelo. Tenemos que superar las viejas energías y abrir las puertas a las energías renovables".
Reconoce que el gofio es su fuerza :-) y se considera activo y extrovertido. Así es, además le gusta debatir, compartir puntos de vista, llegar a acuerdos, saber de todo. En los colectivos en los que colabora ya le conocen bien, con Azarug no valen las palabras, se tienen que ver reflejadas en actos concretos. "Siento impotencia al ver como la avaricia humana destroza los espacios naturales para actividades económicas de una minoría"
Tiene esperanza en su generación y cree que los jóvenes son la base del cambio: "La conciencia en la juventud está en movimiento. Se siente que la gente joven comienza a desarrollar otro tipo de mentalidad".
Azarug colabora también con Asociación pro defensa de la Diversidad marina y los tiburones de Canarias. Su pasión por el mar y su afición por el snorkel le conectan directamente con la protección de los océanos y cree que el objetivo tiene que ser conseguir un equilibrio entre los ecosistemas canarios y la actividad humana. Megáfono en mano, que heredó de su padre, Azarug es un incondicional de las manifestaciones en defensa del medio ambiente en su isla, donde no le fallan las fuerzas para seguir sumando su granito de arena por lograr un cambio imprescindible y necesario.
Sueña con seguir viviendo en Canarias y conseguir la estabilidad entre el desarrollo del pueblo canario y la recuperación de lo natural: "La solución a los problemas medioambientales que ocurren en Canarias pasa, sobre todo, por un cambio de modelo energético".